BURÓ POLÍTICO/ A PETICIÓN DE PARTE…
POR ARIEL VILCHIS
No hay denuncia real, las palabras de Rigo Mares en días pasados solo tratan de llanto rabioso, de pataleo mezquino de una oposición moralmente quebrada. Una que se quedó en los tiempos pasado de corruptelas y que se niega a soltar las riendas del poder y el privilegio.
Y es que lo ocurrido la semana pasada en un acto disfrazado de denuncia por parte del dirigente del PAN en BCS, Rigo Mares, no es otra cosa que una farsa. Denunciar a la alcaldesa de La Paz de actos anticipados de campaña es una guerra sucia que se disfraza de legalidad electoral para matizar el desastre que ellos mismos heredaron. ¡Qué poca memoria!
De tal manera que Rigo Mares sale a escena de nuevo, con ruido, con denuncias de ilegalidades, pero eso suena más a estrategia de posicionamiento que a un acto de defensa de la democracia. Moralmente está derrotado y lo sabe. Vocifera actos anticipados de campaña y uso de recursos públicos pero no aporta ninguna prueba, sin evidencia concreta. Se le agota la narrativa.
De paso, quiere involucrar al Instituto Estatal Electoral y encima lo reta a demostrar de qué lado está. No le bastó con la respuesta tel instituto en su denuncia anterior: desestimada por no tener sustento.
Lo único cierto, en todo caso, es que Mares es un maestro en la simulación. ¿Acaso no han perdido contiendas electorales, una tras otra desde el 2018? de tal manera que tal pareciera más una venganza política por su estrepitosa derrota por la alcaldía de La Paz que una denuncia en pro de la democracia.
Lo curioso es que, mientras la alcaldesa de La Paz sale a la calle al encuentro con la la gente de Baja California Sur, Mares se consume en su propia frustración y arrastra al panismo al precipicio. Tan ciego que no ve el barranco y tan sordo que no escucha a la ciudadanía y las verdaderas causas sociales, esas no las entiende ni reconoce, porque no sabe construir. Quizá es lo que menos le importa.
Pide y se te concederá.
Ya veremos qué sucede, es mi opinión, al tiempo…
